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Sistema continuo de montaje triple

Este sistema seria el ideal pues nos proporcionaría de cuatro a seis cosechas al año. El sistema consta de tres zonas:

Zona de clonación-germinación.
Área de 120x40-60 cm. Se iluminará con un montaje de dos a cuatro tubos de 120 cm. de color 33. Altura mínima 50 cm.

Zona de crecimiento vegetativo. Área de 180x60 cm. Se iluminará con una lámpara de alta presión de 400W. Recomendamos una HPI-T de Philips montada en una MGR 300. También de Philips y especial para invernaderos. Altura mínima 1-1. 5 metros según grosor lámpara.

Zona de floración.
Área de 180x60 cm. Se iluminará con una lámpara de sodio de alta presión (HPS) de 400W. Recomendamos una SON-T montada en una SGR 200 de Philips. Altura mínima 2 metros.



Un montaje de seis fluorescentes de 120 cm. también seria apto para la zona B, aunque el rendimiento seria menor. Las zonas B y C, podrían ser iluminadas con una SON-T AGRO cada una, pues este tipo de lámpara es apta para todo el ciclo. Algunos plantadores doblan la fuente de luz en la zona de floración asegurando un mayor tamaño de los cogollos, y con ello una mayor cosecha. (Aunque también un mayor consumo de electricidad que encarece el producto). Para que el sistema sea continuo suponemos que ya se dispone de clones hembras que se habrán hecho enraizar en la zona A. Una vez las raíces asoman se transplantan a los tiestos definitivos y se pasan a la zona B.




Allí crecerán hasta que tengan la altura de 30-35 cm. entonces se extraen clones (es conveniente sacar más de los necesarios por si hay bajas), y se enraízan en la zona A. Las plantas ya crecidas se dejan unos días más en la zona B para que se recuperen del trauma de haber sido cortadas, y se pasan a la zona C para que florezcan y finalicen el ciclo, momento en que los clones ya habrán crecido y estarán listos para ser esquejados y pasados a floración. La duración de cada cosecha dura lo que dura el proceso de floración. Si las plantas que están floreciendo aún no han madurado y los clones que crecen en la zona B ya han alcanzado la altura, deberemos doblarlos en espera de que las plantas maduren.

Sistema de dos montajes simples paralelos

Dos plantadores disponen de dos sistemas idénticos. Dicho sistema consta de un área de 180x60 cm. (aprox. 1m2) iluminada con una lámpara de sodio de 400W. tipo SON-T AGRO de Philips, apta para todo el proceso. El plantador A, inicia el proceso de crecimiento hasta que las plantas están a punto de clonar y pasar a floración. El plantador A hace clones, se los pasa al plantador B, y pasa a floración.



El plantador B hace enraizar los clones con un par de fluorescentes y los hace crecer en su sistema. Para cuando llegue el momento de clonar y pasar a floración, el plantador A estará listo para recoger y hacer enraizar los clones que le pasa el B antes de iniciar la floración. Así indefinidamente.

El montaje de dos tubos fluorescentes de 120 cm. puede ser compartido ya que nunca lo usarán simultáneamente.

Montaje de las luces

Durante muchos años se han utilizado los fluorescentes para el crecimiento de plantas sin sol. Después se utilizaron lámparas de vapor de mercurio, aunque sin grandes mejoras. Desde la aparición de las lámparas de alta presión: las de vapor de sodio (HPS) y las de halogenuros metálicos(MH), que suelen utilizarse en el alumbrado público (autopistas, parques, estadios, etc), las demás se han quedado anticuadas, aunque los fluorescentes se pueden seguir utilizando. (son idóneos para ciertas fases del proceso).



Las luces incandescentes y las halógenas, no son de nuestro interés. No dan el espectro adecuado y si mucho calor y consumo. Las del tipo MH, son ideales para crecimiento vegetativo y son aptas para germinación y clonación (esquejes). Dan una luz generalmente blanca, existiendo diversos tonos. Las del tipo HPS, son ideales para floración y aptas para crecimiento. Suelen dar una luz de color anaranjado, aunque ya se han obtenido nuevas tonalidades, incluso el sodio blanco.

Los fluorescentes del tipo cool white (color 33) y los del tipo gro-luxe, son ideales para clonación y germinación. Si no hay más remedio, con cualquier lámpara de alta presión o incluso con un buen montaje de fluorescentes, se puede realizar todo el ciclo. Las potencias de éstas lámparas (HP) son de 150, 250, 400 y 1000 W. Las diferencias de precio entre una de menor potencia y otra de mayor, son mínimas, en cambio los resultados son muy distintos. No son recomendables potencias menores a 250 W.



Las lámparas de alta presión llevan balastos muy pesados y deben estar bien sujetas con cadenas o poleas. Se pueden montar los balastos aparte, y sólo sujetar la pantalla y la bombilla a una polea, dado que la luz deberá ir subiendo a medida que las plantas crezcan.

Para lograr un rendimiento parecido a una HP a base de fluorescentes, se requerirá un montaje bastante pesado y de difícil manejo. Hemos de pensar que un watio de luz de una lámpara de alta presión da más luz que un watio de luz fluorescente. Hay soportes con movimiento circular o lateral donde se instalan una o varias lámparas, logrando doblar el área de plantación, aunque son costosoS. Las lámparas MH, requieren funcionar en horizontal alterando su rendimiento las inclinaciones, seria conveniente usar un nivel de obra. Algunos modelos funcionan en vertical, pero con menor rendimiento.

Altura y distribución de la luz

La luz es el elemento primordial para la planta, el más básico. Sin luz suficiente, la planta no llega a su pleno rendimiento. Aunque es posible que una planta crezca en un ambiente de luz pobre, no llegará a producir flores de calidad aceptable. El cannabis es una especie que requiere bastante luz para producir abundantes flores. El ciclo de vida del cannabis está regulado por el fotoperiodo. Para comprenderlo se dice que la planta dispone de un reloj interno que cuenta las horas de luz y oscuridad para saber cuando debe iniciar la floración y cuando el crecimiento. En cultivos de interior es necesario utilizar lámparas especiales que emiten la luz apropiada para el cultivo y el fotoperiodo se ajusta cómodamente con un temporizador. En exterior el fotoperiodo aumenta durante la primavera, llevándose a cabo la fase de crecimiento, y disminuye a partir de agosto, y es cuando se produce la floración.



La distancia de la bombilla a las plantas depende de la potencia. Para modelos de 400W las plantas no deben estar a menos de 25 ó 30 cm. Para modelos de 600W la distancia mínima es de 45 cm. Para modelos de 1000W la distancia es de 60cm. Para que todas las plantas reciban la misma intensidad de luz  es conveniente ajustar la altura de las macetas según el tamaño de cada planta, situando un poco más elevadas las plantas de los costados.

En algunas ocasiones se utiliza luz artificial para complementar la iluminación solar. Por ejemplo puede instalarse un pequeño foco en exterior con un temporizador que lo encienda unas horas cuando anochezca, para alargar el fotoperiodo e impedir que las plantas florezcan.

La forma y tamaño del reflector que tengamos también jugará un importante papel en la cantidad de luz reflejada. Un reflector pequeño dejará escapar gran parte de la luz por los lados. Los reflectores grandes son más eficientes aunque más engorrosos de manejar, ya que ocupan demasiado, se ensucian y pesan más; aunque se fabrican fácilmente a partir de una lámina de metal delgada (metal que sea buen reflectante). Un reflector grande mide por ejemplo 80cm x 80cm, como el que se utiliza en los cultivos mostrados en las fotografías.



La forma que tenga el reflector determinará la distribución de luz, aunque no es un factor que sea determinante en la producción. La forma ideal que ha de tener un reflector es una curva parabólica, parecido a un semicírculo, de forma que la luz se distribuye uniformemente en todo el espacio. Los reflectores pequeños dejan escapar bastante luz por los costados, y es necesario utilizar pantallas reflectoras para aprovechar esa luz.

Potencia de las luces

La potencia determina la cantidad de luz (lúmenes) que emite la lámpara. La cantidad de luz no se mide en watios sino en Lúmenes. La relación entre Watios y Lúmenes no es directa; una bombilla de 400W modelo HPS proporciona 50.000 Lumenes, 125 Lumenes/Watio; mientras que una bombilla de 600W, modelo HPS, proporciona una potencia cercana a los 90.000 Lúmenes, 150 Lumenes/Watio, algo más eficientes (20%) que los modelos de 400W. Es un hecho que se debe tener muy en cuenta, ya que si se utilizan bombillas de 600W, en vez de las de 400W, se necesitrán menos Watios para iluninar la misma zona. Los modelos HPS de 1000W emiten 120.000 Lúmenes, 120 Lúmenes/Watio, algo menos eficaces que el modelo de 600W. Además, estas cifras varían según la marca que se utilice.



Para hacerse una idea de la importancia de la influencia de la potencia de luz en la calidad de la cosecha, el sol emite una potencia equivalente de 1.000W por metro cuadrado, consiguiéndose en estas condiciones las mejores cosechas. Para iluminar un cultivo de interior se necesita una potencia mínima de 400W por metro cuadrado, obteniéndose resultados relativamente aceptables. Si se aumenta la potencia de luz por metro cuadrado hasta los 600W se aumentará la producción y la calidad del producto final con respecto a los 400W, lo cual es un dato a tener en cuenta si se dispone de espacio limitado.

Para tener una referencia, los cultivadores comparan el peso de los cogollos obtenidos (el peso de la producción) con el número de watios utilizados para florecer. Así, un cultivador puede cosechar desde 200 gramos hasta 400 gramos con una lámpara de 400W, si el cultivo funciona. Los cultivadores expertos, cuando cultivan especies altamente productoras, llegan a cosechar cerca de los 400 gramos con una lámpara de 400W, aunque es más fácil conseguir estos ratios con lámparas de 600W, ya que emiten más luz en proporción a la potencia consumida.



El tamaño de la zona que podemos iluminar depende de la potencia, la relación es la siguiente:
Una lámpara de 250W ilumina una zona de 0.3m2 (0.5m x 0.5m)
Una lámpara de 400W ilumina una zona de 1m2, (1m x 1m) aunque en realidad es un poco menos (1m x 0.8m).
Una lámpara de 600W ilumina una zona de 1m2 hasta 1.5m2.
Una lámpara de 1000W ilumina una zona de 2m2 hasta 2.5m2.



El problema de las lámparas de alta potencia es el gran calor que desprenden, y esto se nota aún más en bombillas de gran potencia. La consecuencia de esto es que se deban situar las bombillas a un mínimo de 40cm para las de 400W, hasta 60cm las de 600W y 80cm a 100cm las de 1000W. Si la distancia a las hojas fuera menor se producirían quemaduras. Con fluorescentes no ocurre así, son lámparas que apenas emiten calor y no existen problemas de quemaduras en las hojas.

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